domingo, 11 de enero de 2009

FRANCISCO FONT ACEVEDO, BELLEZA BRUTA


Una nueva voz se abre camino en las letras nativas aquí en Puerto Rico. Después de muchos años de callada preparación, Francisco Font Acevedo publica su colección de cuentos "La belleza bruta"(Ediciones Tal Cual, 2008). Anteriormente había publicado otra colección de narrativa titulada Caleidoscopio (2004). Pero se le conoce en el medio como el moderador del blog literario "Legión Miope".

De "La belleza bruta" Luis Rafael Sánchez ya ha comentado:

“La belleza bruta” configura un magno universo narrativo, poblado por personajes azarosos y sexualidades tan plurales como flexibles, que sacude al lector con el concurso de su prosa astuta, incendiaria, deslumbrante".

Concuerdo con Luis Rafael Sánchez. Cada página de este libro deslumbra, tanto por su contenido como por su increíble dominio de la lógica de personajes atados a los mecanismos internos de una narración francamente brillante por lo inteligente y provocadora. Cierto es, Font Acevedo trabaja la estética de la violencia y el lenguaje hiperrealista como nadie lo había hecho aún en Puerto Rico. Recuerda los relatos descarnados del cubano Pedro Juan Gutiérrez en "Carne de perro", el enfoque en lo massmediático en "Lodo" del escritor mexicano Gulliermo Fardanelli, la visión en zoom de todo lo violento que bulle en la cuidad a lo Satanás, de Mario Mendoza. Font Acevedo se instaura de manera definitiva en lo que se le llama por ahí "realismo sucio" o "literatura basura", y que a mí me ha dado por llamar el hiperrealismo literario latinoamericano actual. Dicha tendencia estética (y ética) se aleja cada vez más de la narrativa identataria de lo real maravilloso, transita por el thriller y el neo-policial iberoamericano para desembocar en una propuesta literaria que desnuda al lenguaje de toda experimentación estética para brindar historias poco ejemplares, nada edificantes, que no ofrecen respuestas acerca de lo que somos o para donde vamos como nación o como especie, pero que se erigen como los valientes textos atestiguadores de una realidad a la vez local y global, desgarrada y honesta, bella en su brutalidad.
Desde ahí se le canta (le robo su título a Font Acevedo) a la belleza bruta del ser humano.

En resumen, que Francisco Font Acevedo es un gran escritor y que "La belleza bruta" es un gran libro.